Se puede decir que los animales domésticos son aquellos que están acostumbrados a vivir y a compartir con el hombre. Aquellos que han aprendido diversos comportamientos y modales que los han civilizado. Aquellos que no demuestran conductas salvajes y agresivas propias de los animales.
Los animales domésticos no pierden su condición de animal, pero destacan sobre el resto por saber entenderse con las personas. Se adaptan a vivir en una casa, sin extrañar otro hábitat, y eso modifica su estatus de animal silvestre.
Un animal doméstico resulta de su interacción con los seres humanos. Tanta es su afinidad, que se compenetran como parte de un mismo entorno. De hecho, hay individuos que integran a los animales domésticos a su núcleo familiar.
INICIO DE LA DOMESTICACIÓN ANIMAL
Se denomina domesticación a un proceso mediante el cual un animal consigue perfeccionar atributos funcionales y anatómicos, para adquirir otras conductas. Es una consecuencia directa de la larga e intencionada relación animal-hombre.
La domesticación surgió por el interés del ser humano por amaestrar a determinados animales, para obtener ciertos beneficios. Es el caso del perro, de quien ha conseguido ayuda para ejecutar peligrosas tareas como cazar y vigilar. O del burro y el caballo, que le ha servido para realizar labores de campo.
En la zona mesoamericana, el fenómeno de la domesticación se inició hace unos 5000 años y se ha extendido. Su progreso, en mayor o menor grado, obedeció a la diversidad de fauna existente, su capacidad para enfrentar los cambios, las circunstancias climáticas y los requerimientos del humano.
PROCESO DE DOMESTICACIÓN
La domesticación animal ocurre en dos etapas: Cautividad, supone la aprehensión del ejemplar y la pérdida de su libertad, y la domesticación como tal. En esta última fase, las carencias del animal son llenadas, lentamente, por el dueño.
En la medida que se avanza, el animal va perdiendo independencia y el hombre se convierte en su protector, cubriendo sus necesidades elementales. Incluso, llega el momento en que no demanda las condiciones de un hábitat en específico.
CARACTERÍSTICAS de los animales domésticos
Cuando un animal es domesticado, puede enfrentar transformaciones que modifican su apariencia y su desenvolvimiento cotidiano. Dependiendo de los atributos que quiera reforzar el amo, estas especies pueden enfrentarse a:
- Alteraciones en ciertos rasgos como color, pelo, musculatura.
- Variaciones en el esqueleto y en los dientes.
- Tendencia a un comportamiento más sumiso.
- Resistencia a los cambios de ambiente.
- Adaptabilidad a la alimentación.
- Cambios en las rutinas de aseo, sueño y necesidades fisiológicas.
CLASIFICACIÓN de los animales domésticos
Una de las divisiones que se ha hecho de los animales domésticos es la siguientes:
- De granja. Se domesticaron para ser empleados como alimento y para cooperar en el trabajo. En estos se encuentran los animales de protección y laboreo (perro y gato), animales de trabajo (burro, caballo), animales de producción (vaca, gallinas, cerdos).
- De compañía: Son los que sirve de acompañamiento al ser humano. Perros, conejos, gatos, loros, caballos son algunos, pero hay una inmensa variedad. Su principal característica, es que se adaptan a coexistir en las viviendas.
BENEFICIOS de los animales domésticos
Los científicos han demostrado que tener un animal doméstico trae consigo efectos beneficiosos. En especial si se está pasando por alguna situación estresante. Desde los años 60, se realizan exploraciones para determinar su influencia en la salud de las personas.
La primera vez que se emplearon los animales domésticos como «coterapeutas», fue en el año 1792, en Inglaterra. Se llevaron a los manicomios de la época, para mejorar la situación de miseria en que estaban las edificaciones y para formar a los pacientes en el autocontrol.
Fue a partir de allí cuando se comenzaron a observar algunas ventajas de tener animales como mascotas. Se manifiesta bajas en la presión sanguínea, fortalecimiento de los músculos, restablecimiento del corazón.
Asimismo, se refleja disminución de la ansiedad y cambios en el estado de ánimo. Delfines y caballos, son dos de las especies más usadas en actividades terapéuticas para chicos con autismo, síndrome de Down y otros con necesidades especiales. Sus ventajas son maravillosas. En todos estos procesos se emplean animales domesticados.
Más bondades de tener un animal doméstico
En general, estas especies son adoptadas o adquiridas en comercios especializados. Cualquier individuo las puede tener para que formen parte de su vida y de su casa.
Debe cuidarlas con dedicación, porque de los animales domésticos se recibe compañía y manifestaciones amistosas.
Por otro lado, las mascotas posibilitan el intercambio con otros individuos e incitan a la plática. Y algo muy importante, en ningún momento juzgan a su amo, no traicionan y son incondicionales con su cariño. Si estas no te parecen suficientes razones para criar a un animal doméstico, puedes evaluar estas otras.
- Producen un efecto relajante.
- Logran que las personas se sientan más seguras.
- Mitigan la soledad.
- Para los ancianos son estupendos, pues se sienten útiles al tener que cuidarlo o mantenerlo.
- Ayudan a enseñar valores de responsabilidad, amistad, amor y compasión en los niños.
- Son fuente de alegría, por lo que mejoran el sentido del humor.
- Son compañeros de ejercicio.
- Apoyan a las personas discapacitadas, cuando se les prepara para ello.
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